La última zona de la casa a la que tenemos libre acceso. El baño. A destacar la lectura propiciatoria y el sistema de desalojo de la poltrona, un sistema un poco rústico si tenemos en cuenta los golpes que hay que darle para que caiga algo de agua, que a veces no evita encontrarse al señor mojón del señor coinquilino. A pesar de todo no es del disgusto del que escribe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario