Constantemente estamos desperdiciando materiales a nuestro alrededor, y en ocasiones la mejor contribución al medio ambiente no es reciclar, sino prolongar al máximo la vida de las cosas, ya sea maximizando su uso o reutilizándolas para otros fines.
Por más que intento reducir mi consumo de envases, siempre termino con más bolsas, cajas y demás enseres de plástico de los que quisiera.
Compro en el mercado la verdura, y aunque llevo mi propia bolsa de tela, siempre hay un puesto con una báscula plana con la que el tendero se vuelve loco intentando pesar las naranjas, que ruedan, se caen y aunque muestro mis deseos de no querer la bolsa, al final se viene conmigo.
Y ya no hay fuentes por las calles de donde beber cuando tienes sed, a veces llevo una cantimplora conmigo (hay que hidratarse), pero en otras ocasiones es inevitable terminar comprando una botella de plástico.
Aquí os dejo una fantástica idea con la que no solo reutilizaréis bolsas y botellas, sino que además tendréis unos curiosos recipientes.
1º.- Cortar la parte superior de una botella (como si fuéramos hacer esos míticos "tirahuevos" para lanzar garbanzos con un globo que usábamos de pequeños)
2º.- Abrir el tapón y meter la bolsa por el interior de la boca de la botella de tal forma que al enroscar nuevamente, la parte superior de la bolsa quede entre el tapón y la rosca de la botella.
Lo mejor es no consumir envases, pero si los tienes, se creativo y reutilízalos. Todos merecemos una segunda oportunidad ;)
Gracias a un amigo que me ha pasado esta idea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario